Una directora de las oficinas centrales “adopta” escuelas y pide que la imiten

En esta entrega semanal de Yo soy HISD, que presenta perfiles de estudiantes, graduados, empleados y otros miembros del Equipo HISD, la directora general del Departamento de Educación Especial, Sharon Cole-Braxton habla de cómo llegó a trabajar para el distrito, lo que la impulsó a “adoptar” escuelas en 2006 y por qué invita a sus colegas para que hagan lo mismo.

De acuerdo con tu perfil de LinkedIn, has estado con HISD durante más de 16 años. ¿Cómo iniciaste y hasta dónde has llegado?

En realidad, vine por primera vez a trabajar para HISD en 1991. Empecé como maestra de lectura en la Secundaria Deady. En 1994 me convertí en la subdirectora de allí y parte de mis responsabilidades era supervisar la educación especial, así que en mis lecciones usé bastantes estrategias tanto del programa de Inglés como Segunda Lengua (ELL) como del de Educación Especial. En ese momento pensé, “Dios mío, no sé nada acerca de la Educación Especial”, así que me certifiqué en esa área. Poco después dejé el distrito por un corto tiempo, dado que a mi marido lo transfirieron, pero regresé en 1999 y me hice coordinadora de Educación Especial. Más tarde, pasé a ser directora, que es lo mismo que hago ahora, sólo que con un título diferente. Y así he estado en la Educación Especial por más de 15 años.

Tu título actual es “Directora General” de la Oficina de Servicios de Educación Especial. ¿Qué implica eso para ti día a día?

Apoyo a las 283 escuelas, a los jefes de departamento, a los especialistas del programa y demás administradores, así como a la comunidad de educación especial. Mi equipo es responsable de todos los datos que entran al sistema llamado Easy IEP en donde tenemos a aproximadamente 17 000 estudiantes. También coordinamos varios servicios como el de musicoterapia y las Olimpiadas Especiales, el registro de los archivos y la adaptación de la educación física para todos los estudiantes del distrito. La mayoría de nuestras responsabilidades implica el manejo de datos, de alguna manera.

Entiendo que “adoptas” una escuela diferente cada año para darle a su director todo el apoyo que necesite. ¿Cuánto tiempo has hecho esto y a qué escuelas has adoptado?

Éste es en realidad mi noveno año, pero he adoptado a algunas escuelas por más de un año. En la Primaria Travis estuve cuatro años y también adopté a las Secundarias Hogg y Reagan. Este año estaré trabajando con la Preparatoria Westbury.

¿Qué te inspiró para empezar a hacer esto? ¿Hubo algo en particular?

Sí. Mis nietos y mis ahijados. Un día veía a mi ahijada en una presentación y pensé: “Me encanta esto, ¿cómo podría pasar más tiempo aquí?” Cuando eres administrador, no siempre puedes trabajar directamente con los niños. Yo veo sus nombres en la pantalla en forma de datos, pero no hago una conexión directa. Sin embargo así, tengo la oportunidad de trabajar directamente con ellos y con el personal de la escuela.

Escuché que también has invitado a otros administradores de la oficina central para seguir tu ejemplo. ¿Es cierto eso? Y si es así, ¿por qué lo hiciste?

Si, es cierto y lo hice porque algunos de ellos, como yo, no tienen niños pequeños en casa, así que pueden dar un poco de su tiempo. Incluso si no es en una escuela de HISD, yo los animo a que participen en el lugar donde viven, porque los niños los necesitan y los directores también. Nunca hay suficientes manos u ojos en las escuelas y podemos ayudar de muchas maneras. Me gusta aprovechar el tiempo después de clases o los fines de semana, porque no me desvía de mi trabajo. Todo en lo que los directores y los maestros necesitan, yo les ayudo.

¿Cuál ha sido tu mejor experiencia hasta este momento?

Una excursión que hicimos con la Primaria Travis al Capitolio en Austin. Tomé un día de vacaciones y me fui con ellos en el autobús escolar. Me encantó el viaje porque a pesar de que se descompuso, cantamos canciones y paramos en una gasolinera para tomar algunas bebidas y refrescarnos hasta que otro autobús viniera a recogernos. Durante la espera, hablamos de nuestras experiencias e hicimos amigos que durarán toda la vida.

Si pudieras darles un consejo a otras personas que están pensando en hacer lo mismo, ¿cuál sería?

Que busquen directamente al director de la escuela. A mí me sucedió que muchas veces ni siquiera me conocían, así que, primero les llamé para que supieran que no se trataba de una mamá de su escuela. Todos podemos ayudar en los días en que hay bailes o excursiones, con un par más de ojos y manos más. Este año, contacté a la nueva directora de la Preparatoria Westbury y ella me envía correos electrónicos con las fechas y horas en que me necesitan.