El Distrito Escolar Independiente de Houston podría perder millones de dólares en ayuda federal a raíz de una reciente propuesta de ley. La medida resultaría en la transferencia de fondos de Título I destinados a estudiantes desfavorecidos de las escuelas urbanas más pobres del país, a escuelas y vecindarios más pudientes.
Esta propuesta, conocida como Ley para el Éxito Estudiantil, implicaría una disminución de 17 millones de dólares del subsidio de Título I que HISD recibe, según lo expuesto por la Casa Blanca. La reducción de los fondos afectaría a 262 escuelas de HISD, la mayoría de las cuales tienen poblaciones estudiantiles compuestas en un 75%, como mínimo, por estudiantes económicamente desfavorecidos.
Tras haber sido aprobada por el Comité de Educación y Fuerza Laboral de EE.UU., la propuesta será presentada este mes ante la Cámara de Representantes. Si la Cámara la aprueba, pasará al Senado este mismo mes.
“Esta propuesta tiene el potencial de mermar drásticamente la habilidad de nuestro distrito de proveer una educación pública de calidad a nuestros estudiantes más necesitados, eliminando programas y recursos suplementarios de los que muchos de ellos dependen”, dijo Terry Grier, Superintendente de HISD.
Los fondos de Título I se distribuyen a escuelas de todo el país que tienen poblaciones numerosas de estudiantes de familias de bajos ingresos. El objetivo de esos fondos adicionales es facilitar a las escuelas la labor de asegurar que todos los niños logren un exitoso rendimiento académico y estén capacitados para cumplir con los rigurosos estándares académicos estatales.
Actualmente, HISD recibe 93 millones de dólares en fondos federales de Título I. Ese dinero se usa para financiar una variedad de programas del distrito, como los centros para la primera infancia, la iniciativa de computadoras portátiles PowerUp, tutores y ayudantes de docentes en el aula, y clases particulares que se ofrecen a después de la jornada escolar y los fines de semana. Además, se emplea para financiar las clases de verano de aproximadamente 170,000 estudiantes de entornos socioeconómicos deprimidos.
Se prevén efectos similares en todo el país. Según lo expresado por la organización Council of the Great City Schools, la propuesta podría resultar en una reducción de casi 7,000 puestos docentes en las escuelas urbanas, varios recortes en programas de capacitación profesional y de asistencia para la enseñanza, una disminución de los recursos para la adquisición de libros de texto y materiales de instrucción, la eliminación de programas para después de la jornada escolar y el verano, y una disminución de los servicios de asesoramiento estudiantil y otros recursos para estudiantes de escuelas urbanas.