Rhonda Mayes (derecha), se siente segura de dejar a su hijo con Cynthia “C.C.” Cormier, conductora del transporte escolar. Todos los días, los conductores de HISD transportan a más de 36 000 estudiantes a la escuela y a casa y recorren más de 15 000 000 millas anualmente.

Nota del editor: La Semana de las Escuelas Públicas de Texas es del 27 de febrero al 3 de marzo. Estaremos publicando las historias personales de varios estudiantes de HISD para demostrar cómo la educación pública ayuda a los alumnos a ser exitosos. Comuníquese por Twitter con #PowerofPublic en @HoustonISD y comparta con nosotros cómo la educación pública es algo positivo en la vida de su hijo.

Rhonda Mayes se preocupa por su hijo LaDainian, estudiante con necesidades especiales de 5.º grado, y los retos que enfrenta a diario. LaDainian necesita silla de ruedas y asistencia médica, social y emocional.

Pero la Sra. Mayes se queda tranquila cuando pasa el transporte escolar por LaDainian y realiza el recorrido que dura una hora para llegar a la Escuela Primaria Reynolds porque sabe que su hijo está bajo el cuidado de la conductora Cynthia  “C.C.” Cormier y el equipo de HISD.

“Ella ha estado desde el primer día”, dijo Mayes. “Tiene un instinto materno y lo protege mucho”.

Cormier, quien tiene tres hijos y cuatro nietos, es una de los conductores de HISD con mayor experiencia. Ha estado al volante durante 17 años. Su día laboral inicia a las 5:15 a.m. Primero realiza una inspección de seguridad a su autobús. A las 6 a.m. comienza a recoger al primero de seis estudiantes con necesidades especiales.

Su ruta incluye las escuelas primarias Reynolds y Foster. Por las tardes, realiza el mismo recorrido de regreso. A veces, regresa a la terminal Barnett hasta las 6 p.m.

“Ahí está mi corazón”, refiriéndose a su trabajo. “Me encanta. No me sacas de necesidades especiales. Queremos mucho a nuestros bebés y eso es lo que hacemos”.

Antes de las vacaciones de invierno, el equipo de Cormier decoró el autobús para las fiestas. También decorarán para la primavera. Pero, la conductora y su equipo nunca cambian.

“Los niños se sienten mejor cuando ven a las mismas personas todos los días”, dijo Pamela Morton, una enfermera certificada que le brinda cuidados a un estudiante con una traqueotomía. “No les afecta si el autobús es diferente pero sí les afecta que no estén las mismas personas”.

El siguiente año escolar, LaDainian entrará a secundaria y su madre ya se pregunta cómo se irá a adaptar.

“Está acostumbrado a C.C. Conoce su voz”, dijo. “Llevar una buena relación con el conductor realmente marca la diferencia”.

Tesha Foster, gerente de la terminal de transporte escolar de HISD