El viernes pasado, un grupo de líderes religiosos, comunitarios y escolares dieron comienzo al programa Project Safe Start, un plan para que los estudiantes empiecen sus vacaciones de verano de manera segura. Este es el 29º año de este programa.

Project Safe Start permite asignar agentes de policía adicionales a los alrededores de las escuelas y a los vecindarios aledaños con fines de vigilancia y prevención de actividades delictivas en los últimos días de clases del ciclo escolar.

«Reconocemos que se necesita del esfuerzo de todos para que esto sea posible», dijo el pastor F. N. Williams II, de Houston Ministers Against Crime. «Se necesita de la colaboración de todos nosotros para lograrlo».

En Project Safe Start participan las siguientes entidades: Houston Ministers Against Crime, el Departamento de Policía de HISD, el Departamento de Policía de Houston, el Departamento del Sheriff del Condado de Harris, el Departamento de Policía de Texas Southern University y otros distritos escolares locales y sus departamentos de policía.

«Lo más importante que hacemos es proteger a nuestros estudiantes. Los protegemos de los peligros», dijo la superintendente interina Dra. Grenita Lathan. «Si los estudiantes no se sienten seguros, no pueden aprender, es así de sencillo. La seguridad es una necesidad humana básica».

Paul Cordova, jefe de policía de HISD, hizo un llamado a los padres para que contribuyan a los esfuerzos del grupo. Les pidió que les recuerden a sus hijos que no deben involucrarse en peleas físicas.

«Deben hacer todo lo posible para encontrarle otra solución al conflicto. Ninguna pelea es una pelea segura», dijo Cordova. «Puede irse de las manos. Las personas pierden los estribos y alguien podría estar armado, o caerse y lesionarse. Además, pueden recibir una sanción o cargos criminales».

Sheryl Victorian, oficial en jefe adjunta del Departamento de Policía de Houston, dijo que ellos aumentarán su visibilidad antes, durante, y después del horario de clases en la última semana. Le pidió a la comunidad que ayuden a lograr un fin de ciclo seguro. «Se necesita de toda la comunidad», dijo Victorian. «Les pedimos a los padres, conductores de autobús, guardas de cruce peatonal y a los hermanos y hermanas mayores que presten atención y, si ven algo, que lo comuniquen».