La República de Panamá es la parte más austral de un puente natural entre los continentes de América del Norte y América del Sur. Se considera una de las ciudades más globales de América Latina gracias a su centro de negocios internacionales, el Canal de Panamá y sus puertos importantes que registran un gran volumen de tráfico en el lado Pacífico y del Caribe. Panamá se encuentra entre las primeras 3 economías más grandes en América Central. Panamá es un país rico en tradiciones, tiene uno de los panoramas citadinos más modernos de Latinoamérica y su Canal es un conducto clave para el comercio marítimo internacional.
El núcleo de la cultura panameña se encuentra en tres categorías principales: su folklore – que forma parte central de cada festividad que tiene el país-, su comida, una mezcla de platillos e ingredientes africanos, españoles y técnicas indígenas, reflejan la diversidad de su población y su amor por la música – desde cumbia tradicional local hasta salsa, merengue, reggae español y muchos otros ritmos caribeños. El folklore local se experimenta a través de una multitud de fiestas, danzas y tradiciones que han sido transmitidas de generación en generación. Una de las expresiones más visibles de la cultura panameña es su vestido nacional, la “Pollera”, un vestido de encaje bordado sobre tela de tejido fino con diseños intrincados y coloridos (que tarda aproximadamente un año en terminar), y adornado con finas réplicas de joyería precolombina que ha sido reconocida como uno de los vestidos nacionales más elegantes del mundo. Muchos platos tradicionales panameños, como tortillas, bollos, tamales y empanadas, se hacen con maíz, pero su preparación es diferente a otras recetas de América Latina, ya que el grano se cocina primero en agua y luego se muele para obtener una masa (en lugar de utilizar harina de maíz para obtener la masa). El maíz fresco también se utiliza en algunos platos.
La Ciudad de Panamá es una de las ciudades más cosmopolitas de Centroamérica, sin embargo, combina lo histórico y lo ultra moderno creando un paisaje único. Algunos están empezando a catalogar a la Ciudad de Panamá como el “Dubái de América Central” debido a sus modernos rascacielos – un signo de la prosperidad de su centro de negocios- y su vibrante y cultural ciudad. La “Cinta Costera” (carretera de circunvalación costera), uno de los proyectos de carreteras más reciente, embellece la Bahía de Panamá y ofrece áreas de recreación que ha añadido a los atractivos de la ciudad, recibió el premio a Mejor Proyecto Global de Caminos y Carreteras 2015 galardonado por Engineering News-Record en su concurso anual.
Referido muchas veces como «El Cruce de las Américas», Panamá no es sólo el punto geográfico donde converge América del Norte con América del Sur, sino también en donde los océanos Atlántico y Pacífico se encuentran en el famoso canal. Panamá ha sido formado por diversas culturas y tradiciones que se unen para crear un país exótico y con una complejidad única. Su diversidad étnica se refleja tanto en los productos tradicionales, como en su arquitectura, gastronomía y festivales. Panamá es un lugar donde confluye lo viejo y lo nuevo, la naturaleza y la arquitectura, y la cultura, con la tradición creando una singularidad como ninguna otra.
Datos curiosos: Las selvas de Panamá albergan una abundancia de plantas tropicales, animales y aves – algunas de ellas no se encuentran en ningún otro lugar del planeta. El Istmo de Panamá es el único lugar en el mundo en el que se puede ver el sol salir en el Pacífico y en el Atlántico, debido a una curva en el istmo.
Esta es la décimo sexta entrega de una serie de artículos resaltando diferentes países en honor al Mes de la Herencia Hispana. Para el listado completo de las notas anteriores, haga clic aquí.