Cada vez son más las escuelas que se están inaugurando gracias al Programa de Bonos y sus maestros y estudiantes están descubriendo cómo los espacios nuevos y las técnicas de enseñanza pueden mejorar el aprendizaje.
En vez de memorizar datos y cifras, los estudiantes que se encuentran en salones de clases del siglo 21 aprenden con un enfoque global que fomenta la colaboración, el razonamiento crítico, y la solución de problemas. Los estudiantes no solo deben dominar el material, si no evaluar y procesar lo que aprenden y aplicarlo efectivamente en el mundo real.
En las escuelas y salones de clases del siglo 21, esto sucede de manera tradicional y no tradicional. Los estudiantes pueden trabajar individualmente, en grupos, como se acostumbra en los salones de clases tradicionales, o combinando estos tres estilos. También pueden trabajar en grupos pequeños fuera del salón de clases, utilizando tecnología para el aprendizaje con base en proyectos.
“Son ambientes del siglo 21, así que cuando caminas por los pasillos y las áreas comunes, podrás ver un maestro con cinco escritorios a lo largo y cinco a lo ancho, y otro [maestro] con [escritorios] en grupos”, dijo Dan Bankhead, gerente general de diseño de construcción, sobre las nuevas escuelas del Distrito. “Depende de cada maestro, pero se adapta cada quien a la manera en que necesita utilizar las instalaciones”.
La flexibilidad es una de las características principales de los diseños de las escuelas del siglo 21 para las escuelas bajo el Programa de Bonos de HISD, ya que les permite a los maestros y a los administradores la facilidad de adaptarse a los espacios según sus necesidades. Otras características comunes incluyen: espacios de aprendizaje abiertos y coloridos, luz natural, y espacios para reunirse en los pasillos amplios o áreas comunes para facilitar el aprendizaje en grupo con base en proyectos.
También es importante que los salones de clases y las escuelas tengan acceso a tecnología de vanguardia. HISD designó $100 millones para realizar mejoras tecnológicas en todo el Distrito, como parte del Programa de Bonos 2012. Además, se implementó la iniciativa PowerUp en todo el Distrito para transformar la enseñanza y el aprendizaje a través de la enseñanza personalizada para cada estudiante y la tecnología que les facilita a los maestros la instrucción, la administración de los programas de estudios, la colaboración con colegas, y el trato con los estudiantes. Gracias a la iniciativa, todos los estudiantes de preparatoria reciben una computadora portátil para su uso en la escuela y en casa. La mayoría de los salones de clases de secundaria también tienen acceso a las computadoras portátiles de su grupo.
“La instrucción empieza a cambiar poco a poco cada año”, dijo recientemente Lenny Schad, oficial en jefe de informática de HISD, durante una reunión con el Comité de Supervisión del Programa de Bonos de HISD, en la que explicó que la iniciativa tecnológica está contemplada para varios departamentos del Distrito.
“El poder no está dentro del aparato, se trata de cambiar las prácticas institucionales. Eso implica cambiar una cultura y lleva tiempo. No es un proyecto de tecnología, es una iniciativa del Distrito”.
El objetivo del Programa de Bonos de HISD de $1,89 billones que aprobó el electorado en 2012, es renovar o reconstruir 40 escuelas del Distrito, incluyendo 29 preparatorias. Una vez terminadas, el Distrito tendrá unas de las preparatorias urbanas más modernas a nivel nacional.
El Programa de Bonos también incluye un presupuesto de $44,7 millones para reemplazar los complejos deportivos y hacer mejoras en las instalaciones deportivas, $35 millones para renovar los baños de las escuelas secundarias, y $17,3 millones para realizar mejoras de seguridad y protección.