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La escuela Wilson Montessori, ubicada en el corazón de Montrose, era todo alegría y entusiasmo el lunes al regresar los estudiantes a un edificio renovado para su primer día de clases del ciclo 2018-2019.

El trabajo de construcción finalizó este verano, y el lunes fue la primera vez que tanto la edificación nueva como los salones renovados estuvieron habilitados y abiertos a los estudiantes.

«Estamos muy contentos empezando el nuevo ciclo escolar en este espacio renovado», dijo la directora de Wilson Montessori, Shameika Sykes-Salvador. «Los maestros están muy satisfechos y les dio mucho gusto instalarse en sus salones y darles su toque personal».

Wilson es una de las 40 escuelas, entre ellas 29 preparatorias, que el distrito está renovando o reconstruyendo en el marco del Programa de bonos aprobado por el electorado en 2012. Esta escuela, que alberga clases desde prekínder hasta octavo grado, recibió $24,7 millones para trabajos de ampliación y renovación del histórico edificio construido en 1924.

Los alumnos de prekínder a tercer grado tienen sus aulas en el sector renovado, donde se han preservado varios elementos del edificio original. Por su parte, los estudiantes de cuarto a octavo grado están ubicados en la nueva edificación.

Sykes-Salvador comentó que ve un cambio muy notable en los espacios renovados.

«Hay mobiliario nuevo y pintura de colores alegres que hace que los estudiantes se sientan bienvenidos», dijo Sykes-Salvador explicando cómo ella cree que los niños se beneficiarán del trabajo de construcción y remodelación.

En la edificación nueva hay un gimnasio, sala de teatro, salones multiuso y un comedor con ventanales que permiten a los estudiantes ver el jardín. En la biblioteca también hay ventanales que dejan pasar la luz natural y conectan a los estudiantes con el espacio exterior.

«Creo que es hermoso y espacioso, con mucha luz natural», dijo Colin Frost, padre de un alumno de la escuela Wilson. «Pienso que va a ser un ambiente de aprendizaje estupendo para los niños».

La esposa de Frost, Vanessa Frost, añadió: «El nuevo diseño y la disposición de los salones de clases contribuyen a que los niños se sientan con mayor libertad para opinar y decir lo que piensan».

Actualmente se realizan obras de construcción en alrededor de veinte planteles. Más del 70 por ciento de los proyectos del bono de 2012 están terminados y esa cifra aumentará a 80 por ciento para fines de 2018. Una vez que todas escuelas estén terminadas, HISD tendrá una de las carteras de escuelas preparatorias urbanas más modernas del país.

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