Kirsten Aparicio, estudiante entrante a séptimo grado, opina que la instrucción presencial de la Secundaria Ortiz ha sido la clave de su éxito este verano.

Después de aprender en línea desde que empezó la pandemia en marzo de 2020, la estudiante de 12 años finalmente regresó a su aula en junio, para asistir a la escuela de verano.

Kirsten es una ávida lectora y comentó que ahora se siente preparada para el séptimo grado y para salir el cascarón.

“Cuando volví, fue como ser la que era antes; y estoy sacando buenas notas”, dijo ella.

Kirsten es solo una más de las estudiantes de HISD que encontraron difícil la instrucción virtual. Desde que el distrito se preparó para volver completamente a la instrucción presencial para el ciclo académico entrante, muchas escuelas experimentaron un aumento de inscripciones en su escuela de verano. Los estudiantes -y sus padres- tratan de cerrar la brecha en el aprendizaje creada tras un ciclo de instrucción virtual.

“Es mejor porque puedo hablar con el maestro en persona si tengo alguna pregunta o si no entiendo algo”, dijo ella. “Fue duro aprender matemáticas durante la instrucción virtual y ahora es como que, finalmente, estoy otra vez en la dirección correcta”.

La Secundaria Ortiz es una escuela Magnet para las Artes Escénicas y Visuales, y ofrece una gran variedad de programas como Banda, Mariachi, Danza, Coro y Artes Teatrales. La futura actriz está emocionada por participar en muchos de sus programas, particularmente en el de las artes teatrales, y comenta que “es divertido ver la historia que hay detrás de un personaje y ver cómo se desarrolla”.

Tina García, maestra especialista de Ortiz, comentó que el cambio en Kirsten es evidente, aunque solo hayan pasado tres semanas desde que comenzó la escuela de verano.

“Realmente prosperó durante la escuela de verano”, dijo García. “Es fantástico verla aquí, mejorando sus notas y emocionada por los años venideros”.

Kristen es la última de su familia en asistir a Ortiz. Está emocionada de asistir a la escuela en persona y finalmente experimentar todo lo que sus hermanos mayores comentaban.

“Mis hermanos vinieron aquí y me dijeron que me estaba perdiendo muchas cosas buenas, como el hacer amigos y hablar con la gente”, dijo Aparicio. “No sé lo que me encontraré el próximo año, pero estoy esforzándome por hacerlo lo mejor posible para graduarme y ser alguien”.