La biblioteca de la Primaria Shadydale se quedó en silencio mientras un grupo de estudiantes de tercer grado se preparaba para probar, la mayoría por primera vez, una remolacha. En el silencio, más de cuarenta pequeñas mandíbulas cortaban lentamente los pequeños palitos de remolacha con leves crujidos. Gracias al Programa Frutas y Verduras Frescas (FFVP), los estudiantes de Shadydale son verdaderos expertos en probar nuevos alimentos.
Los palitos de remolacha no son tan populares como las paletas heladas de kiwi que los estudiantes de tercer grado han probado con anterioridad. Los dietistas certificados de HISD tienen maneras de hacer que una verdura con un sabor poco familiar sepa genial incluso para el exigente paladar de un niño de ocho años.
La visita del martes incluía una lección sobre las remolachas y otros alimentos, con información sobre dónde crecen, las variedades que hay y los beneficios de una dieta balanceada para los niños en crecimiento. Brittany Jones, cocinero de Servicios de Nutrición, mostró un video demostrativo, titulado FALling for Beets, en el cual ella preparaba, paso por paso, brownies de chocolate con remolacha para el Día de San Valentín. Posteriormente los estudiantes probaron una muestra.
Shadydale es una de las 80 escuelas primarias de HISD que se beneficia de este programa que brinda alimentos frescos y variados a los estudiantes para que disfruten durante el día escolar.
“Este programa es asombroso”, dijo Teri Hampton, directora de la escuela. “Desafortunadamente, [nuestros estudiantes] viven en un desierto alimentario. ¿Cuántas veces comerán remolachas? Todos conocían las manzanas, las naranjas y los plátanos, pero algunas de las frutas y verduras que hemos recibido les han abierto los ojos”.
Nathan Raska, dietista de HISD, condujo una sesión de estiramientos y explicó a los estudiantes que la comida que comen da energía a sus cuerpos. Un grupo de estudiantes de segundo grado participó y conversó con Raska y su compañera dietista Gabriella Villarreal, aprendiendo sobre todos los alimentos saludables que pueden disfrutarse con una sencilla receta y el deseo de probar cosas nuevas.
Taylor Thomas, estudiante de nueve años, no pudo detectar las remolachas en los brownies. “Puedes hacer recetas nuevas con verduras que serán muy buenas para tu cuerpo”, comentó.
El acceso a alimentos frescos y diversos juega un papel esencial en FFVP. “Estamos incorporando alimentos frescos y también recetas”, dijo Kathryn Laurance, gerente del área de nutrición para el Programa de Alfabetización Agrícola y Alimentaria de Servicios de Nutrición de HISD. “Creo que hacer que los estudiantes puedan experimentar ambos es realmente importante, porque están aprendiendo más sobre alimentos que quizás no han probado antes”.
Quizás un grupo de estudiantes de tercer grado pensó que sus palitos de remolacha sabían a hierba, pero aun así se los comieron, abriendo su gama de sabores y aprendiendo que los dulces pueden provenir de fuentes inesperadas, como los alimentos.