Cuando Brenda Williams se enteró de que el Distrito Escolar Independiente de Houston iba a cerrar debido al COVID-19, su primer pensamiento fue si tendría suficiente alimento para sus tres nietos al no poder contar con las comidas de la escuela.
Williams antes recibía ayuda de una iglesia, pero a raíz de la pandemia esa ayuda dejó de ser una opción. Ahora, Williams visita los sitios de distribución de alimentos del distrito. El proceso, dice, es fácil. Llega en su vehículo, desde adentro abre el maletero y alguien coloca los comestibles dentro.
«Aprecio lo que están haciendo, tendiendo la mano para ayudar», dijo Williams señalando que el personal siempre es muy atento y que la fila avanza rápidamente. «Viene muy bien en estos tiempos de necesidad. Poner comida sobre la mesa es mejor que no tener nada sobre la mesa».
Los sitios de distribución de alimentos son operados por Servicios de Nutrición de HISD en colaboración con el Banco de Alimentos de Houston. Todos los días se abren cinco sitios en diferentes puntos del distrito, y en cada uno se distribuyen 500 bolsas que proveen a las familias alrededor de 30 libras de comestibles o 25 comidas individuales.
Desde el 14 de marzo hasta el 10 de abril el distrito ha distribuido 1,4 millones de libras de comestibles a más de 47.000 familias.
La directora a cargo de Servicios de Nutrición de HISD, Betti Wiggins, dijo que el programa es necesario porque, de por sí, un elevado porcentaje de los hogares del distrito no siempre cuenta con comestibles para la familia —una situación que se vuelve especialmente difícil en estos tiempos.
«Mucha gente ha quedado sin trabajo», dijo Wiggins. «Si bien normalmente nos centramos en alimentar a los estudiantes, ahora estamos atendiendo a familias carentes de alimento».
El hogar de Williams está formado por su esposo y ella y sus tres nietos, un niño de kínder y dos de prekínder. Una bolsa de comida les cubre la semana, dijo, añadiendo que planifica las comidas de manera que los comestibles que reciben les duren más. Por ejemplo, cuando recibió carne sazonada para fajitas la usó para preparar tres comidas: espagueti, tacos y una ensalada. Williams comentó que a sus nietos les gustan mucho el jugo de manzana y la leche.
Servicios de Nutrición colabora estrechamente con Servicios Integrados y el Departamento de Policía de HISD para coordinar el programa. Wiggins reconoció el mérito de los dos socios del distrito, así como del Banco de Alimentos de Houston, en lograr la distribución de comestibles a los miles de familias que los necesitan. «Todos han dado un paso al frente. La única forma de lograr los objetivos es contar con un buen equipo», dijo Wiggins. «Se me llenan los ojos de lágrimas cuando veo lo bien que el equipo coordina la labor esencial de alimentar a la gente. Me quedo sin palabras ante el arduo trabajo que llevamos a cabo para apoyar a nuestra comunidad».