Mariela Banda estaba ilusionada esperando celebrar el final de sus estudios de preparatoria en persona con sus compañeros de clase de la Preparatoria Milby.
«Ser valedictorian virtual es desafortunado porque es como no cerrar completamente este capítulo de nuestra vida antes de pasar al próximo», dijo. «Es triste no poder compartir la alegría de la graduación con mi grupo de preparatoria. En cambio, debemos preocuparnos por el futuro. Ser valedictorian virtual es difícil y estresante a la vez, pero estoy segura de que mi grupo de compañeros continuará avanzando».
Mariela se comunica con los estudiantes de último año para motivarlos.
«Trato de contactar a todos y ver que estén bien y tengan acceso a las tareas. Mi clase sénior es un grupo de estudiantes resueltos y enfocados en sus objetivos, y yo confío en que harán todo lo posible para lograr sus metas a pesar de estos tiempos difíciles».
El día escolar de Mariela empieza con su primera clase a las 9 a. m.
«Preparo café y me conecto con mi clase en línea», dijo. «Mis dos primeras clases me mantienen alerta porque son muy interactivas. Me encanta que los maestros sean entusiastas. Aún en estas condiciones ellos encuentran la forma de que sigamos aprendiendo. Lo único que me cuesta del aprendizaje virtual es que estar en casa a veces es una distracción, pero estoy aprendiendo a concentrarme».
Mariela ha sido aceptada en las dos universidades que estaban primeras en su lista de opciones, la Universidad de Houston y la Universidad de Texas en Austin, pero aún está indecisa, aunque siente que se inclina más hacia la Universidad de Houston, donde se especializaría en ingeniería mecánica y negocios. Está ansiosa por comenzar el próximo capítulo de su vida.
Mariela ha participado activamente en La Raza y el Club de la Paz. Es presidenta de la Sociedad Nacional de Honor y miembro de la Sociedad de Honor de español. Le gusta correr, ser voluntaria y trabajar en proyectos creativos con su hermana.