Como conductor de autobús del Distrito Escolar Independiente de Houston, Ethan Sowell sabe que su misión es brindar transporte escolar seguro y puntual a los estudiantes.
Pero para él, ese trabajo va más allá de conducir un autobús y siente que puede tratar de tener un impacto positivo en ellos.
«Los niños no pueden hacer nada con respecto a su situación», dijo Sowell. «Alguien tiene que velar por ellos».
Eso fue lo que hizo él exactamente a principios de este mes cuando se dio cuenta de que uno de los estudiantes que se trasladan en su autobús se había vuelto callado y retraído y daba la impresión de estar incómodo, sobre todo en cuanto a la ropa que vestía.
Inmediatamente, Sowell tomó cartas en el asunto y le dio al estudiante una caja azul llena de ropa nueva, tenis, ropa interior y artículos de aseo personal.
«Quiero que ellos sepan que tienen que salir adelante y no darse por vencidos», dijo Sowell, quien ha ocupado un puesto de conductor de HISD durante menos de un año. «Me imagino a mí o a mis hermanos en esa situación, y sé que yo querría que alguien hiciera lo mismo».
Esta no es la primera vez que Sowell ha hecho algo para apoyar el crecimiento y el aprendizaje de un estudiante. Cuando supo de una estudiante que no tenía dinero para una excursión escolar a Six Flags el año pasado, él cubrió el costo del boleto y el pasaje y le dio dinero para gastar en el paseo.
«Esto me da mucha alegría», dijo Coya Geralds, líder de equipo de Servicios de transporte y supervisora de Sowell. «Nos encanta que nuestros conductores sean así, asombrosos, bondadosos y virtuosos».
Sowell dijo que su objetivo es motivar a los estudiantes que pasan por momentos difíciles, y que espera que sus acciones inspiren a otras personas.
Él ya está planificando su próximo acto de bondad: comprarle un abrigo y zapatos nuevos a un estudiante que recoge todos los días de un albergue para personas sin vivienda.
«Si ven a alguien que necesita ayuda, no duden», dijo Sowell.