Para los estudiantes de la Escuela Primaria Horn es imposible no sentirse estimulados cuando entran en el salón de clases del maestro de STEM Alex Jones, quien recibió una de las subvenciones para la innovación otorgadas este ciclo escolar por la Fundación HISD.
Gracias a las generosas donaciones de miembros de la comunidad y alianzas con distintas empresas, para el ciclo 2017-2018 la Fundación logró conceder más de $150.000 en subvenciones para fomentar la innovación en las escuelas.
Jones recibió $7.000 para comprar tabletas, drones y robots para su clase.
«Pudimos financiar proyectos de todo tipo, incluyendo STEM, bellas artes, lectoescritura y actividades al aire libre», dijo Annie Song, directora de operaciones de la fundación. «El dinero nos permite invertir en la creación de oportunidades para la innovación en el salón de clases que benefician tanto a los maestros como a los estudiantes».
Mediante este programa iniciado a principios del ciclo escolar, maestros de todos los niveles escolares, desde Pre-K hasta 12.o, han recibido subvenciones que oscilan entre los $3.000 y $7.000. Por otra parte, grupos de dos maestros o más de una misma escuela podían solicitar una subvención colaborativa de entre $5.000 y $10.000, y las escuelas tenían la posibilidad de solicitar subvenciones de $10.000 a $20.000 para la innovación del aprendizaje en las aulas. Alrededor de 15 escuelas de HISD recibieron una subvención.
Los ganadores de las subvenciones fueron anunciados en la función del Estado de las Escuelas en febrero. La Escuela Primaria Berry recibió $3.100 del Fondo de Subvenciones de la Fundación HISD, la Escuela Secundaria McReynolds recibió $7.000, y la Escuela Preparatoria Sharpstown recibió $20.000.
Berry usará su subvención en la compra de materiales y equipo para un espacio creativo a fin de facilitar que sus alumnos de kínder puedan explorar e inventar aplicando la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM). McReynolds usará el dinero para un programa STEM y de alfabetización llamado “Robots and Literature: Rolling in the Genres”, y Sharpstown empleará los fondos para comprar útiles, equipo y materiales para el proyecto digital Sharpstown Storytelling, que no solo ayudará a los estudiantes a mejorar sus habilidades de lectoescritura y comunicación, sino que les permitirá compartir sus historias.