Power of Public: Darles a todos los niños una voz y opciones

Para Alvin Gibson, a la derecha, y Deshaun James, a la izquierda, Literacy in the Middle le dio una voz y una opción -además de una competencia amistosa. Más de medio millón de libros se distribuyeron en las bibliotecas al interior de todas las aulas de nivel secundaria de HISD. «Algunos libros los he leído varias veces porque me gustaron mucho», dijo Alvin.

Nota del editor: La Semana de las Escuelas Públicas de Texas es del 27 de febrero al 3 de marzo. Estaremos publicando las historias personales de varios estudiantes de HISD para demostrar cómo la educación pública ayuda a los alumnos a ser exitosos. Comuníquese por Twitter con #PowerofPublic en @HoustonISD y comparta con nosotros cómo la educación pública es algo positivo en la vida de su hijo. 

La amistad entre Alvin Gibson y Deshaun James está basada en una competencia constante pues, los dos adolescentes, compiten por casi todo. Ya sea durante un juego de basquetbol, cuando ven a una chica o hasta en algo que podría ser un poco raro para un joven que estudia la secundaria -pregunten quién de los dos ha leído más libros y ambos contestarán al unísono, «yo!».

Pero no siempre fue así. Tanto Alvin como Deshaun tuvieron dificultades para leer cuando estaban en la primaria y a los dos se les diagnosticó dislexia. También, ambos tuvieron que repetir un grado. «Llegó un momento en que quería darme por vencido. Pensé que yo era tonto», dijo Alvin. «Pero mis maestros y mi abuelo me impulsaron».

El amor por la lectura que estos jóvenes tenían se nutrió gracias al programa de alfabetización Literacy in the Middle de HISD, que lleva libros a las bibliotecas de cada salón de clases de nivel secundaria, no sólo en aquellos donde se enseña la lengua en sí, sino también en los de ciencias, estudios sociales y matemáticas. El objetivo es fomentar el nacimiento de lectores independientes y de pensadores críticos que tengan la habilidad de discutir lo que leen.

«He notado que su deseo por la lectura ha crecido desde que se pusieron las bibliotecas dentro de los salones de clases», dijo el maestro de la Escuela Reagan, Benjamin Fullmighter. «Gracias a ellas, los jóvenes pueden elegir lo que les interesa leer y, tanto Alvin y Deshaun como el resto de mis estudiantes, hablan acerca de lo que han leído y hacen preguntas».

Ahora que cursan el octavo grado en el Centro Educativo Reagan K-8, admiten que todavía pasan por momentos difíciles pero comparan la lectura con los deportes.

«Para mejorar hay que practicar y eso se traduce en leer más libros», dijo Deshaun.

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